Poco a poco y con el tiempo contado, voy a intentar seguir elaborando aquellos post que pueda con las mismas ganas que siempre y mucho más en este tiempo en que la Navidad va llegando y más tratándose de Finlandia, ya que es una de las épocas que con más ilusión se viven en el país nórdico. Así que, igual que Helsinki inaugura su Navidad, nosotros haremos lo propio desde Finland Live!
Aún recuerdo con extrema nostalgia cómo viví por primera vez la inauguración de la Navidad en Helsinki. Yo nunca había considerado esta época como algo especial. De hecho, nunca me habían gustado demasiado estas fechas por aquello de echar de menos a la gente que no está ya con nosotros o porque tampoco reconozco ese significado que muchos encuentran en la Natividad, pero he de reconocer que respirar esta época en el país de Joulupukki te hace cambiar de opinión.
Cuando el coro empezó a cantar, entendí todo. Comprendí la esencia de la Navidad en Finlandia, cómo lo viven y por qué, respiré el encanto que estos días interiorizan los finlandeses e inhalé el momento más mágico que nunca había tenido la suerte de vivir. Una vez en la vida, al menos, todo ser humano debería tener la oportunidad de poner esto ante sus ojos y disfrutarlo al máximo porque es algo que sólo puede sentirse, casi no puedo describirlo con palabras.
La pasada semana se inauguró de nuevo la Navidad en Finlandia. Después de la llegada de Julupukki, el discurso del mismo deseándonos lo mejor en esta época estival y tras el comienzo de los coros, despedida de Papá Noel e inicio de la cabalgata, todas las ciudades finlandesas encienden sus luces y se visten de esta forma. Es inolvidable.
Para terminar os dejo un vídeo para que os hagáis una pequeña idea de lo mágico que es este día en Finlandia. Así se vivió la inauguración de la Navidad en Helsinki en 2013. Hyvää Joulua kaikille!
Hyvää joulua! Una semana tarde, pero al fin llego para leerte :)
ResponderEliminarYo también recuerdo con cariño mi primera Navidad en Finlandia, aunque ya a tirones (entonces tenía 3 o 4 años). Recuerdo el saludo a Joulupukki antes de que viniera a casa. Estaba en un centro comercial y le vimos. Entonces me senté en su regazo y le expliqué lo que quería, un coche de bomberos y algo más... Al acabar, nos hicimos una foto y me dio una Joulupipari :)
Lo bueno de esto es vivirlo con la inocencia de la infancia. Está muy bien luego experimentarlo de mayor, aunque ya no es lo mismo.
Saludos!